Отредактировано viski (10.05.2012 15:36)

Mónica Fonseca y Juan Pablo Raba, listos para recibir a su Joaquín
En la recta final de su feliz espera, la imponente presentadora desnudó su amorosa panza, pues en mes y medio nace Joaquín, el otro dueño de su corazón. El resultado, un reportaje gráfico y emocional.
Quienes crean que una mujer embarazada no puede resultar atractiva, que echen un vistazo a estas páginas… No sabemos si fue por el especial interés que puso su compañero de vida durante la sesión de fotos, pero lo cierto es que Mónica Fonseca aparece bellísima transmitiendo una imagen de serenidad y seguridad que no habíamos visto en la presentadora hasta el momento.

La idea era realizar una sesión de fotos que rompiera la imagen tradicional de la maternidad. “El embarazo es un estado de pasión pero a su vez místico, espiritual y milagroso, es un encuentro de sentimientos único y así me siento”.
A sus 30 años y después de vivir una dolorosa separación, Mónica encontró en Juan Pablo Raba la estabilidad que tanto ansiaba, coronando su bonita historia de amor con la llegada de un bebé que nacerá en mes y medio. “Me siento muy bien. Todo marcha a la perfección y es muy emocionante. Es bueno comenzar una nueva etapa de la vida”.

El sex-appeal está relacionado con la fuerza y con ella la sensualidad se multiplica, pues está más fuerte, se siente más poderosa que nunca… Emulando a otras actrices que decidieron lucir sus cuerpos en desnudos artísticos durante su embarazo, la presentadora, nacida en Miami, confiesa que vive una etapa absolutamente deliciosa, pero agridulce… No todo es color de rosa…

¿Esta fue la sesión de fotos más emotiva de tu vida?

Sí, los tres emanamos una energía muy bonita. A Juan Pablo le han tocado muchas sesiones de fotos conmigo, pero en esta sí que se sintió cómodo. Está muy contento con el bebé, también está embarazado y enamorado de la panza, todo el día está pendiente… No deja de decirme que me veo linda.

¿Y tú te sientes atractiva estando embarazada?

Para Juan Pablo, absolutamente; y en realidad en estas fotos queríamos mostrar que una mujer embaraza puede seguir luciendo guapa. Con panza uno no debe dejar de sentirse atractiva y así vivo.

¿Te costó que tu cuerpo se fuera redondeando?

Siempre he sido muy larguirucha, pensaba que me iba a sentir más incómoda. Los primeros meses fueron raros, pero ya pasaron los mareos. El cuerpo se pone muy bonito y la pancita armoniza con el resto. Hasta este séptimo mes y medio todo ha sido maravilloso, pero no sencillo.

¿Por qué?

Pasamos por sustos. La placenta no estaba muy bien en el principio, teníamos miedo que eso fuera a afectar a Joaquín en su crecimiento y me hicieron una amniocentesis. Este proceso ha sido interesante, pero muy largo. Hace dos meses me dio hipoglucemia gestacional y para rematar estoy sufriendo de una alergia oprurito a la progesterona, es decir, alergia al embarazo. (Risas). Debo tomar un antialérgico y aplicarme una crema desde la cabeza hasta los pies. Empiezas a sentir como latigazos y te sale un pequeño brote que te pica por todos lados. En conclusión, me ha pasado de todo, pero tenía que vivir todo esto para darme cuenta de que esto es un milagro.

Te noto más espiritual…

Así es. El cuento es que se debe recibir un hijo como un milagro, pero con sentido de responsabilidad. Cuando me enteré, le pedí a Dios que Joaquín naciera bien, ambos estamos esperando con muchas ansias a nuestro hijo. Este proceso es alucinante.

¿De dónde salió el nombre?

Joaquín tuvo nombre desde el principio, ya es un miembro de la familia. Es muy chistoso ir notando qué le gusta, qué hace que se mueva. Juan le habla todo el tiempo, me encanta ver cómo disfruta esta circunstancia de la vida.

¿El hecho de ser madre te ha hecho extrañar a tu mamá?

Mi mamá murió cuando yo era muy chiquita. Tuve muchas mamás, mi abuela, mis tías, mi madrastra… Sé que es un ángel para mí, pero es un sentimiento raro, pues no me hace falta todos los días. En cambio a Juan Pablo se le murió su papá hace dos años y en ocasiones eso lo intranquiliza. Lo único en lo que pienso es que ojalá nunca vayamos a faltarle nosotros al bebé, ese es mi único miedo.

¿Le has bajado el ritmo al trabajo?

Ha tocado variarlo. Gracias a Dios que la tecnología nos permite hacer reuniones digitales, a través de un chat o skype; si no, la verdad es que sería muy difícil. Empiezo a trabajar desde muy temprano, uno puede delegar pero a veces no es tan fácil, mi trabajo es otro hijo.

¿Cómo crees que asimile Joaquín sus roles de vida?

Yo creo que se va a articular muy bien a la clase de vida que tenemos Juan y yo. Nuestro trabajo es muy divertido y nuestro hijo podrá interactuar con eso, nos va a poder acompañar. Ya estoy preponiendo una guardería en el canal.

¿Y te le mides a otro bebé?

Yo quise adoptar desde muy pequeña. Con Juan Pablo hicimos una negociación pero él siempre me mete un gol en la conversación y yo trato de hacerle el quite. Tenemos una vida muy nómada, con otro chiquitín hay que pensar en establecerse y amo mi vida tal cual como está. Espero acordarme de esta alergia a la hora de pensar en tener otro bebé. (Risas).

El parto se acerca… ¿tienes pánico escénico?

Me angustia bastante por mí, todas dicen que eso duele mucho. Pero en estos momentos estamos con María Paulina Arboleda haciendo el curso psicoprofiláctico y vamos a ver cómo nos va.

Juan Pablo : Un papacito, en mayúsculas

Solo falta mes y medio para que tengas a Joaquín… Es muy emocionante: como pareja, como vivencia, desde la primera ecografía. Cuando ves a un bebé ya formado la película cambia por completo. Las costumbres, los planes, ya todo gira en torno de él. Tratar de ser mejores y que las condiciones también sean óptimas. Faltan dos meses complicados, pero estamos preparados.

¿De verdad adoras a los niños?

Me encantan, no es un sentimiento ultrarromántico, es una sensación paternal de protección que tengo. Me gusta pensar que en ellos está el futuro. Cuando conocí a Mónica supe que quería hacer una familia con ella. Ella no quería tener hijos, pero igual mi emoción logró animarla. Ahora se encuentra totalmente volcada a los cuidados de Joaquín. Está conectadísima con él, lo que me enternece en forma total y eso me motiva a cuidarlos a los dos.

¿Eres más sensible ahora?

Nunca me imaginé que fuera tan profundo el cambio. Me he vuelto más susceptible, cada vez que lo siento tengo una lágrima en los ojos, además es que soy un chilletas. Hasta cuando te pasa, uno no alcanza a imaginar el milagro que es tener un hijo.

¿Qué tipo de papá vas a ser?

Simplemente quiero ser un papá presente. Un papá comprensible pero firme y por supuesto muy amoroso. Quiero ser un ejemplo en el respeto por la vida, que tenga muy buena relación con su mamá, que sea libre y feliz.

Отредактировано viski (17.05.2012 09:27)